martes, 10 de noviembre de 2015

KIKO EL PERRO DE DON PIPO



                                                               
 
                                                                KIKE RODRÍGUEZ IN MEMORIAM
Kike fue una gran personalidad que duro 7 años en la tierra. Nació muy pobre entre la basura, había sido abandonado antes de que sus ojos se abrieran  Incapaz de alimentarse por si mismo. Mucho más pobre que el Nazareno. Aquel nació en un establo rodeado de animales que le daban calor al pesebre. Con sus ojos abierto y fue amamantado  al nacer y luego visitado hasta por los reyes de lejanos lugares.
 Un ángel  enviado por Dios lo vio tirado , semejante a una pelotita negra retorciéndose entre el  duro y caliente  cemento. Lo tomó en sus brazos y lo llevó a su hogar. Fue amamantado con botellitas de biberón hasta que se abrieron sus ojos y comenzó a comer cositas livianas. Asi paso el tiempo y Kiko se convirtió en un joven robusto de pelaje negro aterciopelado y con dos ojos tan grandes como las canicas. El iris rodeado de un anillo castaño dorado. Amado por sus padres adoptivos ,gozó de las mejores atenciones.
Nació santo su pelaje era tan parecido a las sotanas de aquellos antiguos curas. En algo se parecía al Padre de Alers. Nunca fue muy inteligente  pero ello no alteraba su mansedumbre y limpieza de corazón.
Su única travesura fue acercarse a la carretera , donde algo lo atemorizó tanto que decidió vivir entre su patio y alguno que otro paseo a la vereda contigua a su casa. Siempre al lado de su padre adoptivo.’
De tarde en tarde subía las escaleras del taller a reposar y a cuidar a su padre de que no le  sucediese algo con aquellos instrumentos que le causaban dolor a sus oídos y malestar a su olfato.
Era tan casto que no se acercaba a las perras del vecindario para no contaminarse con la promiscuidad. El pecado que nunca soportó. Sus sueños fueron castos y llenos de felicidad.
Pocas amistades le rodearon pues no acostumbraba a la charlatanería de los callejeros que pasaban por sus alrededores.

 Pero a todo santo le llega su dia. Como a todos los elegidos ,tenía que marcharse a las etéreas mansiones. En una mañana amaneció tosiendo y estornudando.Su padre le noto las pupilas de los ojos  muy dilatadas y sus ojos semejantes a un exoftálmico. A Kiko le pasaba algo muy doloroso,no veía ni olfateaba.perdió el apetito. Lo llevaron a emergencias y los doctores no dieron con el mal.Unos días mas tarde empezó a sangrar por la nariz,se debilitó y entrego su alma al todopoderoso de los caninos. Nos ha dejado para siempre, pero siempre estará en nuestra memoria

                                                    Fotos de KIKE









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